El Director General del
Instituto Estatal para la Educación de Jóvenes y Adultos de
Guerrero (IEEJAG), Arturo Roberto Mendoza Mérida, entregó el
certificado de primaria a Darío Sixtos Pascual, trabajador de dicha
dependencia cuya atención educativa se vuelve significativa pues
está vinculada al proyecto estatal “El buen juez por su casa
empieza”.
“Usted es un ejemplo
para todos nosotros, todo el tiempo estamos conociendo cosas nuevas,
aprendemos cada día” le manifestó el Director General a Don
Sixtos, como conocen todos sus compañeros de trabajo a quien se
desempeña como personal de apoyo en el almacén estatal para la
entrega y distribución de diversos materiales en todo el territorio
guerrerense.
El programa “El buen
juez por su casa empieza” forma parte de la oferta de Educación
para Adultos en la entidad y es una estrategia enfocada para que las
dependencias del gobierno estatal brinden los servicios de
alfabetización, primaria y secundaria al personal que se encuentra
en condición de rezago educativo.
Cabe mencionar que el
IEEJAG es la dependencia encargada de atender el rezago educativo
entre las personas mayores de 15 años que no han concluido la
educación básica por medio del Modelo de Educación para la Vida y
el Trabajo (MEVyT), el cual es una alternativa académica diseñada
para reconocer los saberes que han adquirido a lo largo de la vida
las personas que no tuvieron la oportunidad de asistir a una escuela.
La entrevista a
Darío Sixtos Pascual, un hombre de pocas palabras
Al preguntarle a Don
Sixtos como se siente señala “más que nada muy agradecido, hubo
compañeros que se interesaron e invitaron para que me animara a
estudiar” y se queda callado visiblemente afectado.
-¿Emocionado? “Un
poco”, responde con la voz quebrada y regresa al silencio.
Con voz que se va
quebrando poco a poco recuerda “cuando se es joven muchos tienen la
oportunidad de estudiar, pero por diferentes circunstancias yo no la
tuve” -hace una pausa y nuevamente ese nudo conmovedor que se
contagia.
-¿Fue difícil? “Poco”
responde y se ríe el hombre de pocas palabras.
Se pone serio y asegura
“yo creo que echándole ganas sale uno adelante, además también
tengo hijos pequeños y también son motivo para luchar porque ellos
están aprendiendo apenas y yo tengo que darles el ejemplo”; hace
una pausa y ya más relajado dice: “el certificado es un documento
que para mi es muy valioso, independientemente de que no haya tenido
el documento anteriormente, ahorita es muy importante y quiero
compartirlo con mis hijos mayores y mi familia”.
“Se siente uno bien de
ir al círculo de estudio porque el maestro te enseña muchas cosas,
quisiera uno aprender todo lo que sabe el maestro. No fue fácil
pero le voy a echar ganas a la secundaria, no digo que va a ser
fácil, porque a mi edad no se anima uno tan fácilmente, pero le voy
a echar ganas”, dice convencido y emocionado.
“La verdad es que no
tengo palabras, y ahí queda: gracias a quienes me apoyaron”
concluye Don Sixtos un hombre de pocas palabras, con mucha palabra.
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Don Sixtos y la Lic. Anabel Calixto Vargas, Coordinadora de Proyectos Estratégicos en el estado posan para la fotografía en el contexto del Programa "El buen juez por su casa empieza" del INEA-IEEJAG |